29 septiembre, 2009

Hoy sólo habla el silencio, hoy sobrevive el dolor, hoy viajo por la angustia del tiempo, hoy se que nos gobierna el terror. Hoy la tarde hiere, la noche te enloquece y el día siempre así te despierta. Hoy sigo llorando pero por vos luchando para que tu esencia no desaparezca. Hoy desde el cielo me guían tus ojos adonde voy. Hoy en mi pecho siento el recuerdo de tu calor. Hoy me veo en medio de tanta hipocresía, la luna y las estrellas no olvidan. Hoy sólo lleno renglones, hoy la suerte no te pide perdón. Hoy son enormes los escalones, hoy las canciones quedan en un rincón. Hoy todo está en duda, hoy la muerte te saluda y la memoria no te mira y se olvida. Hoy te sigo extrañando pero por vos cantando, para que tu vida de sentido a la mia.


No sólo me dejaste el hecho de ser cuerva o saber nadar. Me dejaste enseñanzas de vida, todos tus consejos y canciones, que retumban todos los días en mi corazón. Y, aunque, sin tu mano soy tan frágil, se que no sufriste ni estás sufriendo, y que desde el cielo me guias, sigo por vos. Porque creo en tu estrella, en aquella que busco en mi sueño mejor para poder luchar, y aunque no estés físicamente y las navidades o veranos no vuelvan a ser los mismos sin vos, se que estas por ahí mirándome, y que tu recuerdo está presente. Cuando termine, me mando para allá, y nos volveremos a encontrar. Te adoro y siempre vas a estar vivo en mi. Este es mi humilde, pero sincero recuerdo.

No hay comentarios: